viernes, 21 de enero de 2022

REFUGIO DE NOCTURNAS AVES, de SALVATORE QUASIMODO

 



Allá en lo alto hay un pino combado;

está atento y escucha el abismo

con el tronco torcido cual ballesta.

 

Refugio de nocturnas aves,

en la hora más alta estalla

en un batir de alas veloces.

 

Mi corazón también tiene su nido

suspendido en lo oscuro, una voz;

también atenta, la noche.



(De Aqua e terre, 1930)





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